Es un hecho ya muy constatado, por los acontecimientos, así como en los distintos eventos artísticos de índole internacional, que la fotografía ya está considerada como una manifestación más de las artes plásticas, como la pintura o la escultura entre otras.
Y no es nada sencillo este modo de expresión. Requiere muchos conocimientos y muchísima práctica lograr fotos artísticas o de calidad destacable, ya que aunque todos podemos y realizamos instantáneas, eso no nos hace ser fotógrafos y mucho menos artistas fotógrafos.
Al igual que con la pintura, son muy variopintas las formas de expresión con la fotografía, a modo de ejemplo:
Jeff Wall conocido por sus bellas imágenes planificadas y escenificadas como si se trataran de un fotograma de una película, o de un documental, sin perder su aura artística. Pese a su negación a seguir la moda del arte conceptual, el minimalismo o la reapropiación, entre otros movimientos vanguardistas, se le ha considerado como uno de los padres del fotoconceptualismo, debido a la teatralización de sus imágenes pensadas compositivamente. Él da más importancia a la hermosura de la imagen y no tanto al mensaje conceptual.
El austriaco Arnaulf Rainer comenzó su obra más característica influenciado por la idea del automatismo surrealista (este movimiento pictórico apelaba a la supresión del control racional en la composición de la obra, dejando al artista libertad total para crear). Son famosos sus histriónicos autorretratos de fotomatón con tachones, garabatos y pinturas, que comenzó a finales de los 60, dándose ya una fusión de fotografía y pintura, tendencia que está actualmente muy en boga.
Jan Dibbets tiende al arte conceptual y efímero como el Land Art, una excusa para realizar la foto deseada, para él la fotografía es la obra de arte y no es la herramienta que sirve para documentar el trabajo efímero de sus performances, que se convierten en una intervención puramente visual, relegando así a la propia performance e intervención paisajista a mero instrumento para captar la imagen fotográfica ideal.
Luego hay gente que se especializa en un tema concreto, como aves, el mundo submarino o reporteros de guerra, que dan cuenta con imágenes de lo que ocurre en los más dispares lugares. Y que algunas de esas fotos se han hecho famosísimas.
En fin, que la fusión e introducción de la fotografía con el resto de las artes plásticas es un hecho incontestable y cada vez más extendido, pero que requiere, como la pintura, sentido, sensibilidad y muchos conocimientos y práctica, somos millones los que hacemos fotos y sin embargo, sólo una pequeña parte hacen fotos artísticas. Una instantánea de recuerdo de un momento o de un lugar bonito o de unas vacaciones, no tienen nada que ver con la foto creativa y original de un verdadero fotógrafo, que a veces requiere paciencia y conocimientos, otras estar en el lugar adecuado en el momento preciso, y tener la vista educada para saber
Para apreciar qué es digno de inmortalizar y ser una buena foto, a veces se requieren miles de fotos para seleccionar unas pocas, y en otras la sensibilidad desarrollada del fotógrafo para ofrecernos una visión original que nos haga reflexionar. Todo esto es mucho más difícil de lo que pueda parecer y nada tiene que ver con la manía compulsiva de los selfis.
Pedro Ortiz
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